Las mil caras de ser (verdaderamente) mujer

Hoy por hoy es sumamente erróneo reducir el término de mujer a ciertas características (como pasa también con los hombres, las personas somos seres extremadamente complejos) y en ese intento de salirnos de los paradigmas y las ideas estáticas muchas podríamos estancarnos en el intento, frustrarnos e inclusive llegar a pelearnos fuertemente contra lo que la sociedad espera de nosotras (o lo que creemos que espera de nosotras).

Por María Renée Estrada 

Y es que ser mujer es una aventura realmente fascinante. Aunque la historia nos demuestra que no ha sido fácil, y que le debemos mucho a guerreras como Hannah Mitchell, Emmeline Pankhurst, Barbara Gould, Edith Garrud, Olive Hockin y Emily Wilding Davison –pioneras del movimiento feminista sufragista (reflejadas en los personajes de The Sufraggetes)– hoy por hoy vemos como la tenacidad del “genio femenino” nos ha llevado a pasar fronteras inimaginables y a escribir historias fascinantes. 

Pero ese “genio femenino” también nos demuestra que ser mujer no es moneda de una sola cara, ni de dos. ¡Al contrario! Ser mujer es un abanico de posibilidades que nos permite realizarnos como seres humanos para alcanzar nuestra misión en la vida. Aunque los hombres también están llamados a una misión en particular, las mujeres tenemos ese “sexto sentido” y ese “toque especial” que nos hace ser  fortaleza y sensibilidad… al mismo tiempo.
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Como soy cinéfila de corazón y lectora empedernida, tengo algunas mujeres favoritas dentro de ciertas películas y libros (algunas ficticias y otras tan reales como yo). A continuación quiénes y por qué… ¡son personajes que realmente inspiran!

1. Hermione Granger
Inteligente, valiente y sensible. Esas tres palabras representan para mí a Hermione, y fueron esas cualidades las que me hicieron quererla desde el principio. Para ella era más importante obtener conocimiento que peinarse (y aquí podemos soltar un par de risas jajajaja) porque sus prioridades eran bastante claras: Había que ser la mejor en la clase y con sus amigos.

2.  Merida
Si pudiera regresar el tiempo y poder reemplazar a alguna princesa de Disney por otro personaje, definitivamente el reemplazo sería Mérida. A veces pienso que Disney se pudo haber inspirado en mi persona para crear a una niña tan apasionada, rebelde y con un gran corazón (sin la parte atlética, por supuesto). Princesa de nacimiento, guerrera por convicción… ¡Mérida es de las mías!

3. Katherine Johnson
Conocí a Katherine hace unos meses, cuando tuve la oportunidad de ver la película Hidden Figures (Talentos Ocultos). Katherine es una física estadounidense, científica espacial y matemática (¡triple wow!) que contribuyó con la aplicación temprana de las computadoras digitales en la NASA. Su más grande logro fue calcular la trayectoria para el Proyecto Mercury y el vuelo del Apolo 11 a la luna en 1969, siendo una mujer fuertemente discriminada en aquella época por ser de raza negra. ¿Cómo no admirarla?

4. Mulán
Mulán es otra princesa, no tan princesa, de Disney. Muy valiente, independiente, franca  y lejos de encajar en las expectativas que tiene la sociedad de su época. Su principal logro, además de ser ella misma, es salvar a China de los Hunos haciéndose pasar por hombre (porque obvio no la iban a dejar ser soldado por ser mujer). A través de su coraje, determinación, inteligencia e ingenio (femenino ¡por supuesto!) logra su objetivo, el cual es principalmente ayudar a su familia y a su país.

5. Melba Beals
Melba fue la mujer que hizo historia como miembro del grupo Little Rock Nine, conformado por las nueve estudiantes afro americanas involucradas en la desegregación de Little Rock Central High School en 1957. El mundo observó cómo se enfrentaron a la constante intimidación y las amenazas de aquellos que se oponían a la desagregación de la escuela secundaria, anteriormente exclusiva “para blancos”. Melba, al igual que otros personajes como Rosa Parks, Mary Kenner, Mary McLeod, Ellen Johnson-Sirleaf, Maya Angelou, Shirley Chisholm, Harriet Tubman y muuuuchas más, son mujeres que derribaron obstáculos y discriminación en su época, demostrándole al mundo que ser mujer va mucho más allá del color de piel.  

6. Matilda 
La niña que me enseñó el camino para ser una lectora empedernida y que ser “diferente” no tiene nada de malo, al contrario. Matilda tenía poderes especiales que la hacían única y especial. Y aun cuando la terrible y acosadora de Tronchatoro intentaba hacerle la vida imposible, siempre encontraba la reacción perfecta para no dejarse intimidar. Muchas veces ciertos estereotipos nos hacen sentir que no somos tan mujeres o “el tipo de mujeres” que la sociedad espera y necesita. Pero la vida nos va enseñando que nuestra esencia es única e irrepetible, y que el mundo no necesita mujeres en serie, necesita mujeres que se amen, acepten y transpiren su esencia. 

7. Kristy Thomas
Kristy Thomas es un personaje de la serie “The Babysitters Club” y siempre me ha encantado porque es genuina, inteligente y una líder nata. No se vestía como las demás niñas, no vivía bajo las reglas o estándares de lo que se esperaba de ella por ser mujer y luchaba constantemente por ser feliz, a pesar de su familia disfuncional. Sin duda alguna un personaje con quien muchas se pueden sentir identificadas.  
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Estas 7 mujeres son mi tipo de mujer, diferentes pero sobretodo ellas mismas. Y me siento identificada porque yo personalmente nunca he encajado, ni nunca lo haré, en lo que la publicidad, los medios y “la moda” definen como mujer. Por otro lado debo dejar claro que hay mujeres, completamente opuestas a mi persona, que considero importantes de mencionar porque han sido y seguirán siendo líderes y modelos para toda aquella que se sienta empoderada por su esencia. Tal es el caso de Diana de Gales, Frida Kahlo, Marie Curie, Coco Chanel y Amelia Earheart, por mencionar algunas.

Al final el mensaje es uno: Existen billones de formas de ser verdaderamente mujer, porque existimos billones de mujeres y todas somos únicas e irrepetibles como personas. El reto consiste en reflejar nuestra dignidad y esencia a través de lo que nos realiza como mujeres y nos permite alcanzar nuestro objetivo, sin pretender cumplir expectativas o desligarnos de la esencia natural femenina.    

Ilustración: Lucía Cosenza, artista, emprendedora y promotora de la mujer