Durante el brote del coronavirus, el gobernador y el secretario de justicia de Texas emitieron una orden que prohíbe los abortos por no ser procedimientos médicos esenciales.
Ken Paxton, secretario de justicia del estado, informó el lunes pasado que la orden emitida por el gobernador Greg Abbott prohíbe “cualquier tipo de aborto que no es médicamente necesario para preservar la vida o salud de la madre” durante el confinamiento por la pandemia.
Quien no cumpla con la orden será sancionado con multas de hasta $1,000 o 180 días en prisión. “Nadie está exento de la orden ejecutiva del gobernador sobre cirugías y procedimientos médicos innecesarios, incluidos los que proporcionan servicios de aborto”, comentó Paxton. “Aquellos que violen la orden del gobernador se enfrentarán con todo el peso de la ley”.
En Ohio, también se tomaron las mismas medidas. Desde el viernes pasado, los centros de aborto recibieron cartas del secretario de justicia Dave Yost. En estas, se les ordenó suspender cualquier aborto quirúrgico “no esencial”. Para Yost, el aborto quebranta la orden emitida por el director de salud estatal.
It is unconscionable that abortion providers are fighting against the health of Texans and withholding desperately needed supplies and
personal protective equipment in favor of a procedure that they refer to as a ‘choice.’— Ken Paxton (@KenPaxtonTX) March 26, 2020
A raíz de estas medidas, diversas agrupaciones ProVida de todo Estados Unidos se unieron para exhortar a los gobernadores de todos los estados a imitar la prohibición. “Si el aborto es una ‘elección’ entonces el aborto es un procedimiento opcional”, dijo Mark Harrington, presidente de la organización ProVida Created Equal.
Por su parte, organizaciones antivida criticaron la prohibición diciendo que era “un agravio a las mujeres que lidian con decisiones complicadas en medio de las alteraciones causadas por la pandemia”.
A pesar de la orden, dos filiales de Planned Parenthood interpretaron a su manera la disposición y mencionan que las “clínicas cumplían con la orden al reducir el uso de equipo médico que en este momento escasea”. Con apoyo de la multinacional abortista, un grupo de abogados antivida interpuso una demanda contra el estado de Texas por restringir el falso “derecho a abortar”.
Mientras tanto, los gobernadores aseguran que lo que sí es esencial es que el personal médico se vuelque de lleno a sus labores de ayuda para combatir el coronavirus. Hasta el momento Estados Unidos supera a Italia y China con la mayor cantidad de casos positivos con más de 82 mil personas contagiadas.
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