Tomado del discurso de Karla de Rodríguez, durante el evento “Legalmente Casados” en nombre de AFI y en apoyo a los esfuerzos del Registro Nacional de las Personas –RENAP-
En la celebración del Día Internacional de la Familia, Asociación La Familia Importa, apoya la iniciativa “Legalmente Casados” del RENAP, evento en el cual 100 parejas contrajeron matrimonio civil, porque creemos firmemente que mediante la promoción del matrimonio, fundamento de la familia, se apoya el desarrollo económico y se reducen los problemas sociales (maras, delincuencia, consumo de drogas legales e ilegales, etc.) y esto contribuye a una cultura de paz.
La prestigiosa universidad de Harvard, en Estados Unidos, durante 75 años, ha hecho un estudio que ha demostrado que la gente a la que le va mejor en la vida es aquella que se apoya en las relaciones con su familia.
Estos resultados coinciden con los que asociaciones que trabajan a favor de la familia y el desarrollo, y que son parte de AFI, han investigado en Guatemala sobre el matrimonio, relación conyugal permanente entre un hombre y una mujer, y la familia.
Entre estudios significativos se demostró que el matrimonio es la plataforma de una familia sólida, que está primordialmente en función del bienestar y educación de los niños. No es una institución “adultocéntrica” sino “niñocéntrica”. Que la familia unida es la base y fuente para el desarrollo de una sociedad guatemalteca sana, responsable y próspera, donde, si se le promueve, protege y defiende, se formarán ciudadanos que respetarán la dignidad de la persona, sus derechos y libertades.
¡Éstas no son ideas bellas sino hechos reales! Estudios sociales y científicos demuestran que esta estructura es determinante y necesaria para la calidad del capital humano, del capital social y económico de Guatemala.
El matrimonio representa un valor significativo para nuestra sociedad, porque la familia cumple funciones sociales estratégicas. Y nadie puede negar que el matrimonio ayuda en la reducción de delitos y de la violencia doméstica. Sirve de catapulta a la economía porque brinda beneficios económicos para los cónyuges y sus hijos, para las organizaciones y, por tanto, para la sociedad. El matrimonio está incluso asociado con salud de los cónyuges, ¡ayuda a la longevidad de los esposos!
El matrimonio aumenta el bienestar de los niños, porque ninguna otra estructura familiar, ninguna, presenta mejores índices para el aumento de riqueza, el mejor rendimiento académico de los hijos y una mejor salud, en general.
Tanto la estabilidad psicológica y la salud de los hijos, como la de sus padres, se relacionan estrechamente con familias fuertes, cuyas virtudes trascienden a la productividad de los trabajadores y las finanzas. Así que ¡¡felicitaciones a los que le han apostado al matrimonio!! Por la gallardía de consolidar su relación de pareja. El matrimonio estable, duradero, es muestra de una voluntad, a prueba de fuego, de valentía de súper héroes.
Tal y como hemos resaltado en nuestra reciente campaña institucional, que quizá muchos de ustedes han visto en nuestras calles, le apostamos a “Súpernovios, súperesposos, súperesposas, súperfamilia”, pese a nuestras debilidades personales.
Nuestra ilusión en AFI, como institución que reúne alrededor de otras 40 asociaciones a favor de la vida, la familia y la libertad, es acompañarles en esta aventura maravillosa del amor comprometido. ¡Hoy se han comprometido en uno con una para toda la vida! Han dicho “SI” al crecimiento personal y familiar, juntos, a envejecer juntos, y, en el proceso, enseñar a los hijos cómo se cuida el matrimonio y la familia.
Los hijos aprenderán de ustedes a resolver las contrariedades y retos de la vida, que nunca faltan. A cómo resolver las diferencias… enseñarán el arte de la reconciliación, aprenderán a pedir y recibir el perdón, ¡a dar y darse! Aprenderán a amar que es el arte de la felicidad, siendo testigos del amor delicado, respetuoso y comprometido de sus papás, lo cual contribuirá, de forma determinante, a prepararlos para sus propias familias.
El papel de la madre y el padre son diferentes, y eso es bueno, son complementarios y necesarios en la familia. Por eso podemos afirmar, sin lugar a dudas, que la familia es la escuela por excelencia de los buenos hábitos, que forjan virtudes, y los principios morales. Quizá sin que ustedes se percaten, esposa y esposo, están ayudando a forjar la sociedad, en un trabajo artesanal. Por estas y otras razones, esa buena decisión que han concretado hoy, tiene efectos transitivos, en sus hijos, en sus futuras generaciones y en la sociedad.
El matrimonio es un determinante positivo de la economía. Brinda beneficios económicos tanto para los cónyuges como para los hijos. Ventajas económicas que son más que la suma de los sueldos de la esposa y el esposo. El matrimonio aumenta el nivel de participación en la comunidad… ¡y eso nos hará mucho bien!
Guatemala los necesita comprometidos, verdaderamente, en este paso que han concretado hoy. Creemos firmemente en que la sociedad de Guatemala son lo que sean sus familias. La fibra moral de este país… ustedes la están custodiando.
Estamos convencidos que todo esfuerzo por fortalecer la familia será un esfuerzo por fortalecer la sociedad. Es necesario decir, repetir y dar ejemplo… ¡de que la familia realmente importa!
La prestigiosa universidad de Harvard, en Estados Unidos, durante 75 años, ha hecho un estudio que ha demostrado que la gente a la que le va mejor en la vida es aquella que se apoya en las relaciones con su familia.
Estos resultados coinciden con los que asociaciones que trabajan a favor de la familia y el desarrollo, y que son parte de AFI, han investigado en Guatemala sobre el matrimonio, relación conyugal permanente entre un hombre y una mujer, y la familia.
Entre estudios significativos se demostró que el matrimonio es la plataforma de una familia sólida, que está primordialmente en función del bienestar y educación de los niños. No es una institución “adultocéntrica” sino “niñocéntrica”. Que la familia unida es la base y fuente para el desarrollo de una sociedad guatemalteca sana, responsable y próspera, donde, si se le promueve, protege y defiende, se formarán ciudadanos que respetarán la dignidad de la persona, sus derechos y libertades.
¡Éstas no son ideas bellas sino hechos reales! Estudios sociales y científicos demuestran que esta estructura es determinante y necesaria para la calidad del capital humano, del capital social y económico de Guatemala.
El matrimonio representa un valor significativo para nuestra sociedad, porque la familia cumple funciones sociales estratégicas. Y nadie puede negar que el matrimonio ayuda en la reducción de delitos y de la violencia doméstica. Sirve de catapulta a la economía porque brinda beneficios económicos para los cónyuges y sus hijos, para las organizaciones y, por tanto, para la sociedad. El matrimonio está incluso asociado con salud de los cónyuges, ¡ayuda a la longevidad de los esposos!
El matrimonio aumenta el bienestar de los niños, porque ninguna otra estructura familiar, ninguna, presenta mejores índices para el aumento de riqueza, el mejor rendimiento académico de los hijos y una mejor salud, en general.
Tanto la estabilidad psicológica y la salud de los hijos, como la de sus padres, se relacionan estrechamente con familias fuertes, cuyas virtudes trascienden a la productividad de los trabajadores y las finanzas. Así que ¡¡felicitaciones a los que le han apostado al matrimonio!! Por la gallardía de consolidar su relación de pareja. El matrimonio estable, duradero, es muestra de una voluntad, a prueba de fuego, de valentía de súper héroes.
Tal y como hemos resaltado en nuestra reciente campaña institucional, que quizá muchos de ustedes han visto en nuestras calles, le apostamos a “Súpernovios, súperesposos, súperesposas, súperfamilia”, pese a nuestras debilidades personales.
Nuestra ilusión en AFI, como institución que reúne alrededor de otras 40 asociaciones a favor de la vida, la familia y la libertad, es acompañarles en esta aventura maravillosa del amor comprometido. ¡Hoy se han comprometido en uno con una para toda la vida! Han dicho “SI” al crecimiento personal y familiar, juntos, a envejecer juntos, y, en el proceso, enseñar a los hijos cómo se cuida el matrimonio y la familia.
Los hijos aprenderán de ustedes a resolver las contrariedades y retos de la vida, que nunca faltan. A cómo resolver las diferencias… enseñarán el arte de la reconciliación, aprenderán a pedir y recibir el perdón, ¡a dar y darse! Aprenderán a amar que es el arte de la felicidad, siendo testigos del amor delicado, respetuoso y comprometido de sus papás, lo cual contribuirá, de forma determinante, a prepararlos para sus propias familias.
El papel de la madre y el padre son diferentes, y eso es bueno, son complementarios y necesarios en la familia. Por eso podemos afirmar, sin lugar a dudas, que la familia es la escuela por excelencia de los buenos hábitos, que forjan virtudes, y los principios morales. Quizá sin que ustedes se percaten, esposa y esposo, están ayudando a forjar la sociedad, en un trabajo artesanal. Por estas y otras razones, esa buena decisión que han concretado hoy, tiene efectos transitivos, en sus hijos, en sus futuras generaciones y en la sociedad.
El matrimonio es un determinante positivo de la economía. Brinda beneficios económicos tanto para los cónyuges como para los hijos. Ventajas económicas que son más que la suma de los sueldos de la esposa y el esposo. El matrimonio aumenta el nivel de participación en la comunidad… ¡y eso nos hará mucho bien!
Guatemala los necesita comprometidos, verdaderamente, en este paso que han concretado hoy. Creemos firmemente en que la sociedad de Guatemala son lo que sean sus familias. La fibra moral de este país… ustedes la están custodiando.
Estamos convencidos que todo esfuerzo por fortalecer la familia será un esfuerzo por fortalecer la sociedad. Es necesario decir, repetir y dar ejemplo… ¡de que la familia realmente importa!
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Muy utópico y excluyente no solo las familias con “un matrimonio legal” tienen familias y familias con hijoa funcionales, insertar esas ideas en la gente y este ridículo concepto de “SUPER ESPOSOS” NOVIOS, ESPOSA, ESPOSO, es lo que termina creando falsaa expectativas de quien esta decidiendo casarse o no y lo más importante. Hace creer a los hijos que estan obligados a repetir el pateón y lo que es peor a perpetuar en la inmortalidad una “matrimonio” que no funciona que no hace feliz a la gente y donde no hay ganas de estar…perp que a como de lugar debe aeguir…eso era cuando la gente vivia max 40 años… Y creo que ni entonces. Eligir una pareja por las razones correctas eso es lo inportante l. Replanteense todas sus declaraciones fulminantes antes de seguir con su “familia feliz si y solo si te casas”
Siento mucho que la ciencia te ofenda, pero estas “ideas” no son inventadas, utópicas ni excluyentes, son UNA REALIDAD CIENTÍFICA, puedes encontrar la información en un sin fin de estudios demográficos significativos y en todas partes del mundo. Obviamente, como en todo, habrán casos de casos, pero la ciencia no miente, las estadísticas demuestran de manera contundente que el matrimonio importa, y que una familia con un matrimonio sólido como base tiene muchos mas beneficios que desventajas, en cuanto a los hijos y los cónyuges. De verdad siento mucho el gran resentimiento y enojo que tienes con este tema, quizá tuviste una mala experiencia, pero lo que sería utópico, ridículo y excluyente es, que porque tu piensas así debas descalificar estudios científicos de profesionales de todo tipo. Y elegir a una pareja por las razones correctas definitivamente ES LO IMPORTANTE, ¿como crees que se fundan los matrimonios sólidos?