Tras las elecciones que tuvieron lugar el domingo 25 de septiembre en Italia, la coalición de derecha encabezada por el partido “Hermanos de Italia”, junto a “La Liga” y “Forza Italia”, serán quienes dirijan el país durante los próximos cinco años.
La católica Giorgia Meloni, líder del partido “Hermanos de Italia” y defensora de la vida y la familia, se convertirá en la Primera Ministra del Gobierno de Italia, bajo el lema “Dios, Patria y Familia”, una victoria que muchos han celebrado en las redes sociales.
La periodista y política Giorgia Meloni Meloni, de 45 años, se convertirá en la primera mujer en ser Primer Ministro de Italia. Tiene una hija, Ginevra, y durante un mitin en Roma se definió como “mujer, madre, italiana y cristiana”. En multitud de ocasiones ha hecho gala pública de su fe. Afirma no tener «una perspectiva confesional» pero sí «librar esta batalla como una laica de sentido común» que «cree en Dios» para proteger el derecho a creer.
En este sentido, no son pocas las ocasiones en que ha pretendido hacer de la denuncia del «genocidio» de los cristianos una parte relevante de sus propuestas. A ella se refirió en el Congreso Mundial de las Familias en 2019 como «la más grande persecución en el mundo».
En sus intervenciones también destacan sus propuestas de apoyar a la mujer italiana. Aboga por asegurar que las mujeres puedan «ser madres sin tener por esto que perder su puesto de trabajo» o «elegir no trabajar y no tener por esto que morir de hambre». También considera necesario «que el Estado incentive a la familia fundada en el matrimonio» y «favorecer con recursos a la natalidad».
Si bien no propone abolir por completo la ley 194, que despenaliza el aborto en Italia, busca hacer cumplir la parte que provee la prevención del aborto. «Nuestra intención es implementar plenamente también la primera parte de la actual ley 194, es decir, que prevea políticas de prevención para ofrecer una alternativa a las mujeres que están pensando en abortar por motivos económicos. Esas mujeres tienen que encontrar un Estado amigo a su lado: más oportunidades», ha afirmado sobre el aborto.
También ha manifestado su oposición a otras cuestiones en boga como son la ideología de género -al afirmar que rechaza «una sociedad en la que cada deseo se convierte en derecho»- o a la eutanasia, criticando «que sea definida como inútil la vida de un discapacitado, de un anciano o de cualquiera que no se adapte al canon del perfecto consumidor».
Su elección, lejos de ser considerada un triunfo para los movimientos feministas, fue catalogada como un «retroceso para los derechos de la mujer», dejando en evidencia la incoherencia de las ideologías feministas de izquierda. Muchos medios de comunicación han catalogado a Meloni como «fascista» y de «ultraderecha» por defender la vida y la familia.
Fuente: ACI Prensa, Religión en Libertad, CNN
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